Terminas una travesia, y aun seguimos con ganas de mas,
asi que Fabiola y yo seguimos pateando
mas que nada para estirar las piernas.
Tras cruzar el arroyo Zarzadillos y otro más donde han puesto esta fuente,
caminamos por el sinuoso camino del daire
con vistas a un lado a los espolones rocosos
y a otro la cuenca del Patamalara
destacan en la lejania
algunos pinos que desafian a la gravedad
finalmente, llegamos al puerto o collado de Paez Blanca
donde nos hacemos alguna fotillo
y retomamos el camino de vuelta
con las ultimas luces de la tarde
y con cada vez más nubes
y levantandose aire
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