Poyos del Molinillo y Lomas de la Garza

 Hace ya tiempo que tenia dos pequeñas pretensiones en el entorno de frigiliana,

 una era subir las lomas de la Garza, y otra, los crestones que suben desde el Higueron hacia la Sierra de Enmedio conformando los Poyos del Molinillo.

 Hoy, y a pesar del incipiente calor, me decidí a ir al menos a por el segundo,

 por lo que comence a caminar por el sendero que baja al rio desde Frigiliana

 y una vez en éste, busqué el lugar por donde unas semanas atrás me habian indicado que se comenzaba a ascender

 ascenso terrible, todo hay que decirlo, un campo a través con una inclinacion tremenda,

 y entre farrallones rocosos con trepadas a veces algo expuestas,

 Esta zona, que fue habitada en la prehistoria, se presenta como una balconada sobre el Higuerón,

 ocupando el meandro justo por encima de la poza de Lizar.

 que queda abajo, mientras yo sigo trepando por las rocas

 buscando el mejor paso en cada momento

 y sin poder permitirme el mas minimo despiste.

 Una vez ganada la suficiente altura,

 enlazo con el sendero que viene desde la cruz del pinto y la casa en ruinas.

 y ya por éste, enlazo con el sendero de la Sierra de Enmedio

 que une los rios Higueron Y Chillar

En este punto, tras haber caminado poco más de un km, y haber consumido más de litro y medio de agua

 me planteo seriamente que hacer

 y con mucho tiento, me decido a avanzar hacia La Garza, por el cortafuegos

 por donde discurre un tenue sendero,

 y que me aproxima al tajo conocido como Rincon de los Hermanicos

 muy atrás queda Frigiliana

 mientras me encuentro al pie del Tajo, que voy superando por un empinado sendero, muy deteriorado, y con mucha piedra y arena sueltas.

 Tras alcanzar cotas cercanas a los 1000msnm, me enfrento a un mar de vegetación que me cierra el paso, por lo que queda pdte volver machete en mano.

Decido volver, apurando en el regreso el ultimo 1/2l de agua

 enlazando de nuevo con el sendero de la Sierra de Enmedio,

 y bajando por el hasta el Rio Higueron

 para desde alli

ascender nuevamente al pueblo para concluir la ruta.